Editorial
entropía (Del griego ἐντροπία, vuelta, usado en varios sentidos figurados).
1. Física. Magnitud termodinámica que mide la parte no utilizable de la energía contenida en un sistema.
2. nombre femenino. Física. Medida del desorden de un sistema. Una masa de una sustancia con sus moléculas regularmente ordenadas, formando un cristal, tiene entropía mucho menor que la misma sustancia en forma de gas con sus moléculas libres y en pleno desorden.
3. nombre femenino. Informática. Medida de la incertidumbre existente ante un conjunto de mensajes, de los cuales se va a recibir uno solo.
No queremos ser complicados. No abogamos en presentarnos de manera vasta para quedar como intelectuales. Queremos ser simples para dejar las cosas lo más claras posibles.
¿Por qué hacer una editorial?
La necesidad de leer es más que segura en todxs nosotrxs, pero muchas veces se nos es difícil leer desde una computadora. Los textos tienen la ventaja de perdurar en toda circunstancia, los podemos leer en el transporte público, en salas de espera, en el trabajo o en el campo, sin tener necesidad de tener electricidad o acceso a internet. No es nuestro objetivo -por ahora- editar textos clichés, ni cosas que estén ya editadas y lo suficientemente difundidas. Por poner sólo un ejemplo, los textos de Alfredo Bonnano, especialmente El Placer Armado, son a nuestro parecer, escritos que están los bastante difundidos y creemos innecesario su reedición (por ahora). Por lo mismo, aun existen textos que merecen ser leídos por muchxs compas que quizás no tienen ni idea de su existencia.
Como bien lo ilustró un propagandista de la Revolución Española, “los libros son el arma contra el fascismo”. Sin despreciar la posición del compa, a nuestro parecer no hay que sacralizar el libro. Es cierto que es importante leer, pero también “actuar sin pensar es tan imbécil como pensar y no actuar”. Pero tampoco se trata de alcanzar un equilibrio cosmológico del medio oriente asiático, se trata de leer, comprender y adquirir/rechazar posiciones, y de superar las contradicciones al momento de actuar. (Para nosotrxs es mucho más práctico tener a una compa a nuestro lado que aislada viviendo su propia vida; tener a un compa junto a nosotrxs que dentro de la prisión; si bien respetamos ciertas decisiones).
La lectura, dicen por ahí, tiene una finalidad práctica. Hay personas que leen mucho, pero son una incoherencia ambulante; preferimos ser de las que leen poco pero tratan de hacer cosas coherentes por muy humildes que sean.
Para nosotrxs, la solidaridad no es una consigna impresa en un panfleto, ni tampoco es una acción que se deba emprender sólo para defender. Puesto de ese modo, la propaganda no es sólo papel entintado.
¿Por qué “entropía”?
En química, entropía es una propiedad que permite saber qué parte de la energía no podrá ser utilizada en el trabajo debido a su dispersión por el caos generado. La entropía crece si el desorden aumenta.
¿Complicado? Éste proyecto, esta editorial, éste desorden, éste caos, esta entropía, es la que nos permitirá desviar la energía que cada día malgastamos en nuestras aulas y en nuestras oficinas, para redirigirla en algo que nos da más placer. En términos marxistas, generaremos caos es nuestras vidas para que nuestra no-vida no nos siga alienando la plusvalía de nuestro vigor.
Al empezar a jugar como editorial, no nos planteamos nada serio, ningún gran objetivo a largo plazo ni seriedad que nos encadene y que nos haga terminar sintiéndonos como en nuestros empleos o casas de estudio. Si bien no reconocemos fechas ni horas, eso no quiere decir que no tengamos comprimiso ni que no pongamos de nuestra parte cuando nos planteemos proyectos nuevos. No tenemos ataduras con esta nueva instancia de creación, destrucción, deconstrucción y construcción; lo que hacemos lo hacemos cuando nace la necesidad y cuando se establece la afinidad como norma esencial. Por muy trillado que suene, lo nuestro es libre, espontáneo y salvaje. No sabemos hasta cuando durará esto.
¿Qué sentido tiene sacar textos para que sean leídos, si la mayoría de las veces son guardados para no ser releídos ni difundidos jamás?
Ésta es quizás la pregunta más cruda y necesaria que hoy por hoy nos debemos hacer quienes nos declaramos nihilistas, anarquistas, antiautoritarixs, comunistas, subversivxs, antisistemáticxs, rebeldes y revolucionarixs en general. Y no en el sentido literal de la pregunta. Ponemos un ejemplo: ¿Qué sentido tiene rebelarse contra el sistema? ¿Acaso se cree poder destruir a esta megamáquina?.
Cada unx, honestamente, podrá generar respuesta propia. La nuestra, en ese sentido, afina bastante con lo dicho alguna vez por el CSO Sacco y Vanzetti:
Hay que entender que ninguna acción en sí misma genera la caída del Capital, ni parapetarse en un techo, ni parar una biblioteca, ni portar una carga en la mochila; eso no está en cuestión. Es el sentido que motiva las acciones lo que genera una ruptura con la sociedad sustentada en la explotación y el Poder. No vivimos esperando un futuro ideal en donde poder concretar nuestros sueños y anhelos. Aquí y ahora, en cada pequeño o espectacular acto de revuelta recuperamos nuestras vidas. Lo irónico es que las recuperamos aún cuando se nos vaya la vida en ello.
Y es por eso que editamos. Porque nuestro sentido es romper con la lógica existente. (Encasillarla dentro del término «Capitalista» sería reducirla a términos muy simples). No queremos venta, queremos trueque; no queremos lucrar, queremos compartir; no queremos caridad, queremos solidaridad; no queremos apropiación, queremos difusión, aunque tenemos entendido que no siempre se dan las cosas del modo que nos gustaría.
Esperamos habernos expresado lo más claramente posible.
Una nueva primavera de 2011…
Entropía Ediciones
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